LOS VIAJEROS.
CAPÍTULO I
Que somos?
Sentada en la pirámide de keops estaban Jacinta y su abuelo, mientras admiraban el paisaje y hacían un recuento de las cosas que pasaban ella y su abuelo en cada uno de los múltiples viajes que realizaban por diferentes épocas, lugares y países en su mente merodeaba una duda.
Y fué en ese lapsus de tiempo cuando le preguntó a su abuelo lo siguiente; Abuelo tu y yo que somos?
-Siempre viajamos, conocemos tiempos y espacios diferentes al de todos los humanos, yo no envejezco y tu tampoco puedes morir, tenemos siempre la misma edad; claro, a veces cambiamos de ropa y de manera de hablar según la época en la que estemos o en el país en donde nos encontremos. Pero dime abuelo nosotros como nos podriamos llamar, ya se que yo me llamo Jacinta y tu Artemio pero creo que no somos humanos; ellos mueren, ningún humano es eterno.
Artemio escuchaba cada una de las palabras que Jacinta le decía pero, cómo le iba a poder responder algo que ni el mismo alcanzaba a entender, lo único que él sabía era que no estaba muerto, a lo mejor era un alma en pena, pero las almas no eran tan visibles como lo eran ellos para los humanos.
Lo que le respondió este pobre viejo a su nieta fue:
-Hija mía, ni yo mismo sé lo que somos, sabes Jacinta en repetidas ocasiones yo he tenido la misma duda que hoy me externas, por eso no sé decirte que somos, tenemos el aspecto de un ser humano y en realidad yo me siento como un humano, pero lo que no me puedo explicar es por que nunca llegamos a morir como ellos. De lo que sí estoy seguro es de que Dios nos necesita así como estamos o cómo andamos hoy por el mundo, pues podemos llevar en estos libros todas las anotaciones necesarias para el trabajo que se nos pide.
Jacinta miró su libro e hizo un recuento de todas las notas que llevaba escritas a través del tiempo. En ésa bitácora se encontraban todos los momentos que para esta pequeña niña habían sido los más especiales en su aventuras por los espacios de tiempo llamados eras, épocas o años.
Cada que terminaban una aventura Jacinta y su abuelo se iban a algún lugar alejado y distante en lo más alto del monte Everest o a la muralla China o simplemente como están hoy, en la pirámide de Guiza (mejor conocida como la pirámide de Keops) en Egipto, sacaban sus libros de recuentos escribían sobre los mejores y más dolorosos acontecimientos de sus viajes y esperaban la llegada de "Miranda".
Miranda era la encargada de llevarlos a su siguiente parada en el tiempo, ella los traía y llevaba por el mundo entero.
Después de unas dos horas llegó Miranda, la encargada de llevar a nuestros amigos a su siguiente destino, una nueva forma de ver el mundo, sus tragedias y las cosas más dolorosas que podría pasar la humanidad iban a tener que vivir de nueva cuenta Jacinta y su abuelo, pero en ésta ocasión verán que los humanos podemos destrozarnos en instantes y que una cabeza llena de maldad puede acabar convirtiendo a miles de hombres y mujeres en los seres más repudiados y odiados a través de la historia, como la segunda guerra mundial en la que Adolf Hitler fue el protagonista de la más sangrienta y horrible barbarie humana.
CAPÍTULO I Que somos? Sentada en la pirámide de keops estaban Jacinta y s...